domingo, 27 de julio de 2014

Gerardo Méndez y sus DO FERREIRO

              El calor aprieta - en parte se agradece que haya llegado por fin el verano de verdad - y a mi me apetece beber más un buen vino blanco que cualquier otra cosa (agua a parte). Así que hoy dedico mi post a una increíble bodega gallega: Bodegas Gerardo Méndez.

            La bodega se fundó en 1973, pero trabajan las viñas desde 1850 generación tras generación. Y aunque elaboraban vino desde que esta se inauguró, no fue hasta 1986 (con la formación de la D.O. Rías Baixas) cuando sacan su primer vino con la marca DO FERREIRO. Pero lo que mucha gente no sabe es que Gerardo Méndez fue uno de los fundadores de la Denominación de Origen Rías Baixas y se le considera embajador de la uva Albariño, ya que es un verdadero artista a la hora de cultivarla y elaborarla.

La bodega.

              Es una casa solariega típica gallega la que acoge tanto la bodega como la vivienda familiar. Se encuentra en un entorno precioso dentro de Meaño (Pontevedra), 100% recomendable para ir a visitar. Y las 5 hectáreas de viñedo - todos de la variedad reina de la D.O., Albariño - se localizan en el valle del Salnés, con cepas jóvenes y bicentenarias.

Parras.

Cepa centenaria.



    La filosofía de la bodega es trabajar con un sistema lo más natural posible, tanto en el viñedo como dentro de la bodega.


    Por ello cuidan las viñas con un mimo excepcional para evitar en la mayor medida posible que aparezcan enfermedades y el tener que aplicar tratamientos después. Cada cepa es única y requiere un cuidado diferente.


    En la bodega vinifican cada parcela por separado, por ello los depósitos que tienen son tan pequeños (2000, 3000, 4000 y 6000 litros).








               Los vinos que se elaboran en esta bodega - todos ellos empleando únicamente Albariño - son vinos blancos de mucha calidad, habiendo quien los denomina vinos de autor. Pero yo considero que son vinos excepcionales, muy tradicionales pero extremadamente cuidados.

Albariño DO FERREIRO
Albariño DO FERREIRO Barrica




      En Gerardo Méndez elaboran tres tipos de vinos (más un orujo y un licor de hierbas):





       Para mí, sin menos preciar al resto, la estrella es este: Albariño DO FERREIRO Cepas Vellas.

       Un vino 100% Albariño de las cepas más viejas de la bodega y elaborado con un 10-15% de uva con Botritys Cinerea o Podredumbre Noble, reconocido hongo utilizado en los tan famosos vinos franceses de Sauternes) que le da un toque aterciopelado al vino.

Muy elegante, fresco y armonioso. Su producción es muy pequeña ya que dependerá de cómo venga la cosecha (en torno a 8000 botellas). Cuesta 26-27 euros. Lo recomiendo para cuando tengáis que hacer un regalo, para una ocasión especial o como simple capricho  ^_^




                 Y me despido con una foto con la que intento tentaros un poquito más a probar cualquier vino DO FERREIRO. A mí simplemente me encantan. Pasad buen verano!!!



lunes, 14 de julio de 2014

Ante el calor del verano... Soluciones!!

                   Aunque este año podríamos decir que el verano está comenzando ahora (al menos donde vivo actualmente, que es Madrid), porque aún no nos han atacado las temperaturas asfixiantes comunes por estas fechas, a mi me apetece más beber algo fresquito. Y como soy "La Chica Del Vino"  ^_^  pues os voy a hablar de los vinos (o formas de tomar vino) que me gustan en verano, y más aún si estoy de vacaciones!!!.


               Puede que sea por el calor, pero estos días bebo mucho más vino blanco (a veces también rosado) que tinto. Me refresca y lo disfruto con locura. Aunque eso no quita que en algunas cenas me pida el cuerpo un buen tinto. A quién no le gustaría beber un gran tinto por la noche, supongamos un entorno idílico, a la orilla del mar, con una suave y fresca brisa marina... Jejeje, siento si os doy algo de envidia con las fotos a los que aún seguís levantando el país y trabajando estas fechas. Sólo pretendo motivaros, animaros, y haceros desconectar y soñar un poquito.



*** Eso sí, un par de apuntes sobre beber vinos fríos en verano:
1. No son para quitar la sed sino para disfrutarlos. Así que para la sed está el agua. 
2. El vino blanco o rosado calientes no molan. Recomiendo que no te llenes la copa hasta arriba porque se te calentará el vino seguro antes de que te lo acabes. (Si no es así, revisa el punto 1). Vale más la pena tomarte varias menos llenas.
3. Nunca con hielo, por dios. El hielo es para el agua, los refrescos, el gin&tónic... Me pasó un verano, en un hotel muy chulo pero con el inconveniente de tener alojados a muchos "guiris" (sin ofender) de costumbres raras, el pedir un vino en el bar de la piscina, y casi caerme al preguntarme el camarero si lo quería con hielo.


          Y dicho esto, al tema. Empezaré con algunos vinos blancos y rosados, ricos y económicos, que recomiendo beber este verano.




    1. YUGO. 

Un gran vino blanco elaborado con la variedad Airén, en la bodega Cristo de la Vega

Pertenece a la D.O.Mancha, tiene un grado alcohólico de 11,5 % vol. y un precio en tienda que no supera los 3 euros. Muy frutal y de boca golosa, pero con la frescura que le da una buena acidez.

Excelente relación calidad-precio, y tremendo blanco manchego que espero sirva para que la gente se quite ciertos prejuicios.






      2. SINFO ROSADO.

El rosado más bebido en Valladolid es de Bodegas Sinforiano, D.O.Cigales. Puede decirse que es uno de los "culpables" del resurgir del rosado.

Su precio ronda los 4 euros, y tiene de alcohol 12,5% vol. 

Rosado con mucha fruta roja, ligero carbónico natural y una gran acidez que le da mucha frescura. Se deja beber de maravilla. 








        3. CAVA ROSÉ NU RESERVA

Porque no podía faltar un cava, este rosado de Maset del Lleó está bien bueno. 

Elaborado con Garnacha y Trepat, tiene 11% vol. de alcohol y cuesta menos de 10 euros.

Es un cava moderno y original, que se deja beber muy fácil porque es muy suave y su burbuja relativamente fina, y que si te lo encuentras este verano no podrás resistirte a él.







            Y cambiando de tercio, paso a hablar de algunos cócteles que pueden hacerse con vino.
  

    * Espumoso con limón y fresas:

Mezclar 50ml de agua con 100g de azúcar (calentándolo mejor). Añadir el zumo de 1 ó 2 limones y la ralladura de la corteza de uno de ellos. Y enfriar.
Macerar 250g de fresas cortadas en cuadraditos en el almíbar hecho durante una hora en la nevera.
Servir en copas y echar la botella de cava o espumoso por encima.



  
      * Red Wine Margarita: 

Humedecer el borde de la copa con una rodaja de limón y después en sal.
Mezclar hielo picado, el zumo de un limón, 1 parte de tequila blanco, 4 de vino rosado y media de triple-sec en una coctelera. 
Agitar y servir en los vasos.



              Y cómo no, una buena y tradicional sangría (con vino blanco o tinto) o un tinto de verano (me encanta la versión que hacen en algunos sitios con granizado de limón como acompañante del vino). 

            Eso sí, por salud estomacal (o de cuerpo y mente en general), aunque no pido que compréis vinos caros para ello, exigid una mínima calidad en los vinos siempre.

             Y a disfrutar del verano!!!


miércoles, 2 de julio de 2014

La Gran Batalla del Vino de Haro

            A quién no le suenan fiestas como San Fermines (Pamplona), Fallas (Valencia), Las Cruces (Granada y otros), San Isidro (Madrid)...??? Pues hoy quiero hablar de una fiesta que me encanta. Un evento que se repite una vez al año y que mucha gente aguarda con gran expectación contando los días (va por ti, David!). Me refiero a la Batalla del Vino de Haro.

             

             Ya había oído hablar de ella (en el mundillo del vino, y más aún adorando Haro, es inevitable), pero no fue hasta hace tres años cuando me lancé, y juntando a unos amigos me enfundé mi traje blanco de guerrera y me uní a la batalla. Desde entonces todos los años voy (en diferentes modalidades... porque la noche de Haro y sus jarreros tienen mucho peligro), pero la más especial fue la primera, fue mi bautismo en vino.

             Y cómo empezó todo este jaleo? Pues fue hace muuuuucho tiempo. Tras la muerte de San Felices de Bilibio, los paisanos de la zona iban a los Riscos de Bilibio (lugar donde se celebra la Batalla) a visitar su tumba. Y por ello, por el siglo XV, el ayuntamiento de Haro decide organizar una romería en el mismo lugar, con fiestas incluidas, entorno a los días de San Juan y San Pedro. Y ya llegando al siglo XX comienzan a producirse los primeros bautizos de vino (o remojones), siendo en 1940 cuando por primera vez emplean  el término Batalla del Vino.

Vista desde abajo de los Riscos de Bilibio.

            La Batalla tiene lugar cada 29 de Junio por la mañana bien prontito. Tras la procesión y misa, comienza la esperada batalla. Y tiene unas normas que medio resumidas serían estas:

* Objetivo: Manchar al prójimo de vino hasta que quede más morado que el pendón (bandera) de Haro.

* Hay que vestir de blanco pulcro con el pañuelo rojo tradicional de las fiestas. Aunque durará poco...

* Las armas "legales" de esta pacífica batalla pueden ser: toda clase de botas, botellas (nunca de vidrio), calderos o cubos, sulfatadoras, pistolas de agua... Siempre aparece alguien con inventos asombrosos.

* Divertirse, hacer amigos, cantar, reír... Pero no fiarse de nadie!!!!

* Y en cuanto comience el almuerzo (típico de caracoles y chuletillas al sarmiento) habrá terminado la Gran Batalla.


                Y ahora os muestro algunas fotos de aquella "primera vez", con alguna anécdota o consejillo.

              A los Riscos se puede subir en coche/bus o andando. Si caminas ve con paciencia y ganas de hacer amigos por el camino. Si vas en coche ve pronto para pillar aparcamiento y también ve con paciencia por los atascos que se forman. Nosotros casi quemamos el embrague del coche que nos prestaron (coche viejito, cuestas, atasco... Que conste que yo no conducía!!). Ah!!! Y no olvidéis poner plásticos o mantas en el coche porque se sube limpio, pero se baja... Y el ayuntamiento pone buses, que son una buenísima opción y te quitas de líos.

Subiendo en coche, "desayunando" con Prado Enea.

Con la tropa casi al completo, y bien limpitos (bueno, no todos, jeje).

             En cuanto al vino que llevéis, nosotros siempre distinguimos entre dos tipos: el que nos vamos a beber que llevamos en botas controladas, y el que vamos a tirar a la gente que llevamos en garrafas, pistolas o donde surja. (Truco, el vinacho tinto puedes diluirlo con agua y tienes más volumen para tirar y mancha igual). Una nota importante: desayunar fuerte!!! aunque no os hayáis acostado aún esa noche.

Nada más llegar nadie da tregua, hay que atacar!!!
Gran imagen del previo al impacto
Y del impacto. Hay quien hasta disfruta.
             
              Ahhh!! Una cosa importante. El primer año según llegué a casa tiré toda la ropa a la basura (hasta la interior) pensando que las manchas (mejor dicho, el tinte) no saldría. Y el segundo año lavé todo y volvió a su blanco natural. Truco: si no sale de primeras con un par de lavados, probad con agua oxigenada (un chorro en las manchas que queden es mano de santo). De todos modos llevad ropa que no apreciéis demasiado...

            Y cómo no, ya que estáis allí (en Haro y La Rioja) disfrutad de sus vinos. Os recomiendo la zona de La Herradura (es como una mini zona Laurel -Logroño- menos caótica y de gran calidad) porque es perfecta para irse de vinos y pintxos. Tienes una gran variedad de vinos riojanos, sobretodo de Haro, que puedes pedir con nombre y apellido. Mis recomendaciones: para comer la zapatilla, la brocheta de sepia, el pimiento relleno (de los que pican) o cualquier pintxo con setas... y para beber siempre pido Muga o Martinez Lacuesta (blanco y tiento, pero hay muchas maravillas) ^_^
             


              Y poco más... Sólo decir que el año que viene pienso repetir y os animo a vosotros también. Es una gran experiencia, rodeados de gente sana y maja. Se hacen amigos, hay mil anécdotas... 100% recomendable.